Contaccio (I)

Contacto + Acción = Contagio

Textos por Sergio Mota de la Hoz (http://sergiomota4.wordpress.com)
Información relacionada : www.nodamosconelnombre.blogspot.com

01. Sirvo, luego existo

La facultad de Arquitectura Superior y la facultad de Arquitectura Técnica de Sevilla, comparten desde hace unos años el denominado patio, que no entraremos a valorar por el momento. Este espacio ha acogido y acoge durante todo el año eventos, exposiciones, intervenciones anónimas, y sobre todo alberga a cientos de alumnos durante su tiempo libre, su descanso para comer o simplemente el tránsito espacial entre ambas escuelas. Entre esta amalgama de acontecimientos, sobresale un concurso celebrado por la escuela técnica, en el que diferentes alumnos compiten por la construcción in-situ de una barbacoa. La definición de esta barbacoa es una simple estructura de tres muros de fábrica de ladrillos, unidos entre sí en forma de C, con una altura de un metro veinte. Este ejercicio práctico cuyo fin es el desarrollo constructivo de la barbacoa, tiene como consecuencia la implantación dentro de este patio de un elemento inerte, perenne, un elemento más o quizás el único del mobiliario de este espacio público con la excepción de que nadie puede o decide usarlo.

Desarrollamos un ejercicio de recuperación, de revitalización de aquellos lugares o elementos que se han olvidado en el flujo evolutivo de los espacios públicos. Simplemente devolverle el uso para el que fue pensado. Interacciones urbanas comparte una barbacoa con sus miembros, disfrutando de esa pieza fácilmente criticable pero que funcionalmente aporta las necesidades de una barbacoa. Todo esto ante la admiración de los viandantes, que miran asombrados, no se muy bien si por el atrevimiento de unos individuos a realizar una barbacoa en el patio de la facultad, o por advertir que aquellos muros que no se sabe muy bien para qué fueron instalados, están siendo utilizados para lo que se pensó.

02. ETSASsecolumpia
Un columpio rojo, el que pueda que piense, el que no, que lo disfrute.

El que pueda que piense…, o más bien el que quiera que piense. Una provocación, pero sin las acepciones negativas de la palabra, sólo la incitación para hacer algo que no se está acostumbrado a hacer, en este caso, reflexionar sobre aquellos espacios cotidianos, los lugares que a diario transitas, vives y ocupas. Pensamos que la escuela de arquitectura no puede concebirse como una infraestructura, que cubre unas necesidades, y en la que los estudiantes se convierten en unos usuarios que llegan, trabajan y se marchan. De ahí que queramos revelar nuestro descontento con el lugar que debe acoger esos otros momentos, esas otras experiencias: el rato para comer, el descanso entre unas clases, el tiempo libre en un día intenso y extenso de trabajo…

Materiales reciclados y un sencillo montaje in-situ, dan como resultado esta intervención. Una provocación a reflexionar.

El que quiera que lo disfrute…, domesticar los espacios y que mejor que hacerlo pudiéndonos al mismo tiempo divertir, experimentando esa sensación de ingravidez que supone estar colgado de unas cuerdas que  impiden el contacto con el suelo durante unos instantes. Balancearse mientras adoptas una percepción distinta de la realidad, abstraerse por un momento para no pensar en nada. Una provocación a divertirse.